2025: Un año de transformación, comunidad & resiliencia

Carlo Steensma1 comment

Este año se cumplen 5 años desde que llegamos a la finca. En muchos sentidos, se siente como si hubiéramos vivido cinco vidas desde el día en que recibimos las llaves de esta tierra vasta y degradada, llena de posibilidades, pero también de desafíos que nunca podríamos haber anticipado. No teníamos idea de lo grande que era realmente la montaña que teníamos por delante: transformar este lugar en una finca agroforestal regenerativa capaz de sostenernos a nosotros y a nuestra comunidad, mientras criábamos a nuestros hijos.

2025 ha sido otro año de cambios y transformación, no solo en la tierra, sino también a nivel social y dentro de nuestro proyecto. Comenzamos el año dando la bienvenida a nuestro segundo hijo, Artur Viggo Steensma, un verdadero regalo de la vida que ha ampliado aún más nuestros corazones. Ver a Paolo convertirse en hermano mayor nos llena de orgullo, y tener dos hijos nos motiva todavía más a contribuir a la creación de un mundo en el que merezca la pena crecer.

También empezamos el año con la intención de formar una cooperativa. Invitamos a Jesse, Gabriel y Lisanne a compartir responsabilidades para que la finca pudiera crecer a través de la colaboración y no depender únicamente de una sola familia. Tras un episodio de agotamiento en el verano de 2024, nos dimos cuenta de que una finca a pequeña escala solo puede prosperar mediante el esfuerzo compartido, y no cargándolo todo sobre unos pocos hombros.

Sin embargo, después de varios meses de intentarlo, decidimos colectivamente que la cooperativa no era el camino adecuado para nosotros en este contexto. En lugar de aportar ligereza, trajo más complejidad y no nos ofreció la calidad de vida que todos estábamos buscando. Aun así, estamos profundamente agradecidos por todo lo que han aportado a la finca, al proyecto y a nuestra familia, especialmente a Gabriel y Lisanne por hacerse cargo de todo para que pudiéramos descansar durante el nacimiento de Artur. Les deseamos lo mejor en los próximos pasos de su camino.

Y justo en este momento de transición, llegó otro desafío. Una tormenta de granizo, que duró apenas entre 10 y 20 minutos, destruyó todas las hortalizas que habíamos estado cuidando durante meses, justo cuando estábamos a punto de recoger los frutos de nuestro trabajo. Fue un golpe duro. Pero lo que vino después nos mostró lo que realmente significan la resiliencia y la comunidad.

Amigos, familiares y personas que nos apoyan desde distintas partes del mundo nos ayudaron a salir adelante a través de una campaña de micromecenazgo que nos sostuvo durante los meses siguientes. Vecinos, amigos y clientes se unieron a nosotros en una jornada de voluntariado para retirar las plantas dañadas y replantar, justo a tiempo antes de que llegara el calor del verano. Un desafío doloroso se transformó en un regalo, un recordatorio de lo acompañados que estamos.

Este año también nos llevó a replantearnos cómo producimos alimentos y cómo colaboramos. Al quedar el huerto completamente dañado, nos asociamos con otros pequeños productores ecológicos para seguir ofreciendo una amplia variedad de verduras y frutas a nuestra comunidad. Esto nos permitió seguir abasteciendo a la zona local mientras reconstruíamos poco a poco nuestro propio huerto. También nos demostró que no necesitamos cultivarlo todo nosotros mismos. Al centrarnos en menos cultivos y hacerlos bien, apoyamos a otros productores, llegamos a más personas que buscan alimentos ecológicos y nutritivos, y evitamos el agotamiento.

Algunos de los nuevos productos que ahora podemos ofrecer a nivel internacional son jabones naturales elaborados con nuestro aceite de oliva, una jabonera artesanal hecha de madera de olivo y, muy pronto, una variedad de productos elaborados con algarroba, el sustituto local del cacao y del azúcar. Quizás aún estés a tiempo de conseguir regalos para tus seres queridos durante las fiestas si haces tu pedido a través de nuestra página web.

A pesar de las dificultades, este año también trajo belleza y renovación. Tras años de sequía, por fin recibimos más lluvias, devolviendo una nueva sensación de esperanza a la tierra. Aunque las lluvias intensas impidieron la cosecha de albaricoques y la tormenta de granizo dañó muchas ramas jóvenes, la naturaleza volvió a sorprendernos con su resiliencia, como se reflejó en la abundante cosecha de aceitunas que llegó después.

La finca incluso pudo acoger la boda de Dasha y Kamiel, quienes fueron voluntarios en la finca en 2024 y se sintieron tan conectados con el lugar y su misión que quisieron invitar a sus seres queridos a experimentar su energía mientras celebraban su amor. Nos sentimos profundamente honrados de poder acoger un momento tan especial y de que la finca pueda albergar tantas formas distintas de vida y energía.

Al cerrar este año, nos sentimos agradecidos por todo lo vivido: los desafíos que nos han moldeado, la comunidad que nos ha sostenido y la tierra que sigue respondiendo al cuidado y a la regeneración. Miramos con ilusión al próximo ciclo alrededor del sol y a todo lo que traerá consigo. Gracias por formar parte de este camino junto a nosotros.

Permanece atento para conocer más sobre nuestros planes para el próximo año, que incluirán más educación, un mayor enfoque en la agroforestería y la incorporación de nuevos e increíbles productos de productores artesanales.

Te deseamos un final de año cálido, festivo y nutritivo, rodeado de personas queridas y buena comida.

Carlo, Coralie, Paolo y Artur

Comentarios (1)

Phil Blaney

The Green Rebel farm wow! The Green Rebel (Carlo and Carille) and arrived in Spain at roughly the same time. I have been so lucky to see the Green Rebel farm grow and also to see the Green Rebel family grow ,all totally amazing. I would also like to mention the produce from the gram is super good and also the people met are special full of commitment, especially Carlo and Coralie.I wish you guys all the best for 2026.You guys got this.👏👏👏

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